Palacio de Moret

Edificacion de la segunda mitad del siglo XIX, ubicado en la confluencia de los ríos Valdeazogues y Guadalmez, en la Vega de San Ildefonso, a unos 7 Km de distancia del núcleo urbano de Guadalmez. Está formado por un edificio palaciego central en estilo neoclásico , muy al gusto de la alta burguesía madrileña de finales del siglo XIX, y rodeado por una serie de dependencias de estilo popular: cuadras, graneros, viviendas y una pequeña ermita de planta rectangular con fachada en ladrillo visto rematada por una espadaña típica.

El palacio, propiamente dicho, es una construcción de planta rectangular a la que se añade una torre rematada con almenas donde se sitúan las escaleras que conectan las diferentes plantas, realizado todo él en piedra y ladrillo. La fachada presenta tres cuerpos separados por cornisas en ladrillo visto. En los dos primeros cuerpos los vanos son ventanas rectangulares y en el tercero «ojos de buey», todos ellos rematados con el mismo tipo de ladrillo. La puerta principal se encuentra enmarcada por dos columnas, con capiteles compuestos, fundidas en hierro, y se abre a un jardín cercado de tapial con dos puertas de acceso, realizadas igualmente en ladrillo visto.
Su estructura consta de dos plantas, ocupadas por la vivienda señorial, sótano y buhardilla, y el tejado, sobre armazón de madera, vierte a dos aguas.

En la primera planta se ubica el zaguán, con decoración mural de temática floral y geométrica en techos y paredes, y desde él se accede a diferentes estancias como la cocina y los dormitorios.

En el pasillo principal aún se pueden observar los huecos dejados por los cuadros y tapices que jalonaban sus paredes.

El palacio fue mandado construir por el gaditano Segismundo Moret y Prendergast, elegido por primera vez Diputado a Cortes por el distrito de Almadén en 1863, fecha desde la cual arranca la relación de este insigne político, que llegó a Presidente del Gobierno y que ocupó todas las carteras ministeriales salvo las de Guerra y Marina. Posteriormente, el Palacio fue vendido a la familia Márquez de Prado.

Durante la contienda bélica de la Guerra Civil sirvió de dependencia militar, pueden leerse varias inscripciones en las paredes del palacio haciendo referencias a calendarios e insignias de la época, escritas por los presos y militares que vivieron durante la contienda y postguerra. En los años sucesivos, el abandono de las instalaciones ha ido dejando huella, ya que con frecuencia fueron utilizadas como graneros, cobertizos agrícolas e incluso como establos para el ganado.

Bienvenido a Valle de Alcudia y SIerra Madrona | Aseturva

Instalar
×